Cada día es más frecuente encontrar espacios de guardería en las oficinas modernas. Las empresas se han dado cuenta de los grandes beneficios que estas zonas conllevan para los empleados y su productividad.

En general, ofrecer guarderías en el lugar de trabajo puede tener múltiples ventajas tanto para los empleados como para los empleadores, al mejorar la retención de talentos, la productividad, el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, la diversidad e inclusión, y el bienestar económico de los empleados.

Un atractivo para atraer y retener a los empleados

Ofrecer guarderías en el lugar de trabajo ayuda a mantener a los empleados valiosos, que son padres o madres de familia. Esto puede aumentar la satisfacción laboral y la lealtad hacia la empresa, lo que reduce la rotación de empleados y los costos asociados con la contratación y capacitación de nuevos empleados.

Esto, sin lugar a dudas, es un atractivo para atraer trabajadores cualificados y de talento a la empresa. Las empresas que ofrecen beneficios adicionales como guarderías pueden ser más atractivas para los empleados potenciales, lo que puede mejorar la competitividad de la empresa en el mercado laboral.

Aumento de la productividad

Los empleados que tienen acceso a guarderías en el lugar de trabajo suelen tener menos distracciones relacionadas con el cuidado de sus hijos, lo que les permite aumentar su productividad. Otro beneficio asociado es que se reduce la absentismo laboral por motivo del cuidado de los niños, al ofrecer una supervisión directa y constante del menor en las horas laborales.

Conciliación laboral

Las guarderías ayudan a los empleados a equilibrar sus responsabilidades laborales y familiares de manera más efectiva. Esto puede reducir el estrés y la carga emocional de los empleados, lo que a su vez mejora su bienestar general y su satisfacción con el trabajo. Además, en una sociedad moderna y flexible como la actual, este tipo de servicios fomenta la diversidad e inclusión en la empresa, al permitir que los empleados que son padres o madres de familia tengan igualdad de oportunidades en su desarrollo profesional, lo que genera un entorno laboral más inclusivo y equitativo.

Ahorro para los empleados

Tener una guardería en el lugar de trabajo conlleva un ahorro significativo en los costos de cuidado infantil para los empleados. No solo por poder ahorrarse la mensualidad de una guardería externa, sino también por el ahorro de tiempo y combustible a centros infantiles lejanos al centro de trabajo. Sin duda alguna, ayuda a aliviar la carga financiera de los empleados y su bienestar económico.

Ideas para decorar una zona de guardería

Desde luego, el diseño de interiorismo de una guardería implica un estudio más profundo y detallado del espacio, los materiales y las funciones que se realizarán. No obstante, podemos dar unas claves para empezar:

Plantear una temática puede ser una forma divertida de decorar el espacio. Por ejemplo, temas de animales, naturaleza, bosques, mar, selva…, o también personajes de cuentos.

La paleta de color también es muy importante. Se suelen utilizar colores vibrantes, que transmitan energía y alegría a los pequeños, con el fin de que encuentren un espacio confortable y divertido al que deseen volver.

Los muebles deben tener una escala menor y adecuada al tamaño de los niños, en cunas, cambiadores, sillas, mesas y estanterías. Es muy fundamental que sean seguros, que no contengan aristas ni esquinas en punta, que sean livianos y de materiales ecológicos que no contengan pinturas, barnices y otros materiales tóxicos.

Organizar el espacio por áreas suele ser muy práctico. Una guardería debe contar con un área recreativa, un espacio educativo (con mesas y pizarra, por ejemplo) y zona de almacenamiento (para libros, abrigos, etc.). Cuando no se dispone de mucho espacio, las áreas deben flexibles para  poder transformarse rápidamente según la actividad que se desarrolle en ellas.

Fotos: OfficeSnapsShots