Los grandes estudios de arquitectura e interiorismo ya están aplicando la inteligencia artificial (IA) a sus proyectos de oficinas. Al ser una herramienta tan novedosa para la optimización de la gestión, procedimientos y diseño, hemos hecho una relación de tareas en la que la IA puede ser útil a la hora de planificar un proyecto de oficinas.
Nuestra intención es esbozar los siete puntos principales para que el lector después pueda hacer su propia investigación, ya que el universo de la IA es inabarcable en un primer acercamiento.

Ventajas de la inteligencia artificial
Gracias a la IA, los profesionales pueden acceder a múltiples opciones de diseño según los parámetros y criterios que se requieran, ampliando así las posibilidades creativas y funcionales del proyecto.
También permite analizar grandes cantidades de datos de diseños anteriores, por lo que es posible identificar patrones, tendencias y preferencias, que ayuden a mejorar los diseños actuales y futuros. En definitiva, la IA puede ayudar a solucionar problemas de diseño que, de otra manera, requerirían mucho más tiempo, energía y recursos, o serían imposibles de abordar de forma tradicional.
Optimización del espacio
A través de programas de IA se pueden establecer el diseño más óptimo del espacio, teniendo en cuenta los metros disponible, las configuración de planta, los accesos, las fuentes de luz natural, el número de empleados y sus funciones, etc.
Para llegar a estos resultados, muchas empresas analizan los datos del uso de las oficinas, que captan a través de sensores, cámaras o registros de acceso. Todos estos datos, que se tardaría mucho tiempo en analizar, los analiza la IA en minutos, arrojando soluciones reales y prácticas para que los espacios se utilicen de forma más eficiente.
En definitiva, la IA puede determinar la mejor ubicación de los puestos de trabajo, salas de reuniones y áreas comunes para maximizar la eficiencia y el bienestar de los empleados.
Gestión inteligente de los recursos
Uno de los grandes beneficios de la IA aplicada a las oficinas es la gestión eficiente de los recursos energéticos, con la consiguiente reducción de costos operativos y sostenibilidad.
La IA puede controlar el uso de energía (aire acondicionado, iluminación, etc.), por medio de sistemas que “aprenden” el comportamiento de uso del edificio y ajustan el consumo energético automáticamente.
En otras palabras, los algoritmos de IA pueden analizar la iluminación y la climatización de la oficina y proponer ajustes para reducir el consumo de energía sin comprometer la comodidad de los empleados. Esto no sólo beneficia al medio ambiente, sino que también puede generar importantes ahorros a largo plazo en los gastos operativos.
Automatización de tareas administrativas
Durante mucho tiempo, el trabajo de “hormiguitas” ha sido una constante necesaria en las funciones laborales. Gracias a la IA, las tareas repetitivas y mecánicas las hace el ordenador, permitiendo al trabajador dedicarse a otras tareas más creativas y estratégicas.
Por ejemplo, los asistentes virtuales como ChatGPT o Microsoft Copilot sirven para redactar correos, programar reuniones, hacer resúmenes de documentos o actas de reuniones automáticamente.
Google Assistant también ofrece funcionalidades avanzadas, como la reserva automática de salas de reunión. Estas soluciones no solo ahorran tiempo, sino que también mejoran la experiencia del usuario.
Zapier ayuda a automatizar las partes más tediosas del trabajo diario. Con más de 6.000 integraciones y servicios, permite automatizar toda clase de tareas repetitivas. Con su plan gratuito, puedes realizar hasta 100 tareas al mes, optimizando los procesos de manera significativa.
DeepL, por su parte, es una excelente herramienta de traducción con una precisión del 94%. Es ideal para empresas que trabajan en un entorno global, asegurando la calidad en la comunicación multilingüe.
Análisis predictivo para la toma de decisiones
Al hilo de lo anterior, sobreviene el análisis predictivo, es decir, la planificación adecuada de las tareas, lo que en proyectos de interiorismo y arquitectura es absolutamente primordial: reduce riesgos, maximiza los plazos y ahorra costes.
El análisis de los datos históricos de proyectos anteriores, con criterios que incluyan, por ejemplo, factores climáticos, proveedores externos o locales, condiciones laborales, geografía del terreno, sobrecostes, etc., es una información valiosísima para aplicar en proyectos futuros y evitar que sufran las mismas incidencias o condicionamientos.
Mejora del bienestar de los empleados
A pesar del temor que despierta la IA en el entorno laboral, bajo la sospecha que suplantará la fuerza humana, su aplicación bien entendida irá en sentido contrario. El objetivo de la IA es facilitar la vida laboral de los trabajadores, tanto agilizando sus tareas diarias como creando un espacio más confortable y saludable.
Algunas oficinas usan IA para monitorear niveles de ruido, temperatura, luz y calidad del aire. Si hay demasiada luz o poco oxígeno, el sistema lo ajusta. Esto mejora el confort y reduce el estrés.
Al crear espacios de trabajo más eficiente y personalizados, la productividad y el bienestar de los trabajadores aumenta, lo que repercute en la productividad global de la empresa.
Diseño espacial
Los algoritmos de IA pueden analizar las preferencias de estilo, colores y diseños y ofrecer sugerencias personalizadas. Desde la elección de los colores de las paredes hasta la selección de obras de arte y accesorios decorativos, la IA puede recomendar opciones que se ajusten a la imagen corporativa de la empresa.
Existen programas de IA que crean modelos en 3D y experiencias virtuales para visualizar el espacio. Por ejemplo, RoomGPT es una herramienta que permite crear espacios optimizados a partir de una información básica sobre la habitación, como su tamaño, comodidades y ubicación. Es importante tener en cuenta que RoomGPT tiene una restricción de tres imágenes generadas por el usuario al día.
Oficina amueblada con mesas M4 y sillas de lImobel Inwo
Elección del mobiliario
La difícil tarea de elegir el mobiliario adecuado para una empresa se facilita enormemente gracias a la IA. Según los criterios que se establezcan, como los metros disponibles, el tipo de trabajo, la distribución y las necesidades específicas de los empleados, la IA es capaz de recomendar la disposición óptima de los muebles, maximizando el espacio disponible y optimizando la comodidad y la ergonomía.
El futuro ya está aquí y no podemos dar la espalda ni retrasar la integración de la IA en la planificación del diseño de oficinas. Para 2025, se espera que el 85% de las tareas de oficinas estén gestionadas por tecnología avanzada. Las empresas deberán introducir los cambios necesarios, invertir en recursos y programas de formación de sus empleados para el aprendizaje de estas nuevas tecnologías.