La maximización del espacio es un requisito que se pide a los proyectistas, Incluso en grandes oficinas, para que cada metro sea aprovechado al máximo. Es frecuente encontrar buenas soluciones para colocar zonas de trabajo en espacios mínimos, situando el escritorio contra la pared, fabricando muebles a medida del hueco o utilizando mesas flexibles. Os enseñamos algunos casos muy inspiradores, donde la falta de espacio ha sido un reto que se ha solucionado con éxito.

Zonas de trabajo contra la pared

En esta zona de paso, entre dos áreas de oficinas, se instaló una tabla corrida y volada, con un fondo de 40 cm, la medida necesaria para que el trabajador pueda sentarse cómodamente sin chocar contra la pared. La distribución en L permite que haya cuatro puestos de trabajos no permanentes, delimitados cajoneras. Es especialmente interesante cómo se ha enaltecido esta esquina con un revestimiento pétreo para darle más personalidad a una zona que es de tránsito.

Escritorios flexibles y ergonómicos

La mesa Heaven V.2. es un diseño versátil y funcional, que está especialmente pensado para maximizar el espacio. Su fondo de 80 cm (con anchos que van del 120 a 180 cm) permite colocarla de distintas formas, tanto de manera exenta, enfrentada a otra mesa o contra la pared.

Pero lo más relevante que ha desarrollado el departamento de I+D de Limobel Inwo ha sido la incorporación de motores de alta calidad, para elevar la altura de la mesa de forma ininterrumpida, de 60 a 125 cm. Los motores son silenciosos y proporcionan gran estabilidad a la mesa. Este sistema ergonómico proporciona bienestar al permitir un ajuste de altura fácil y rápido, evitando así la fatiga muscular y fomentando el movimiento durante el día.

Además, cuenta con un sistema anticolisión, que hace que el motor se detenga durante el descenso si detecta un objeto con el que pueda chocar.

Zona de trabajo en una estructura

Este estudiado diseño permite tener dos puestos de trabajo integrados en una sola estructura, que comprende también baldas, armarios y cajoneras. La estructura metálica va anclada a la pared y al suelo en cuatro puntos, y se puede modular al gusto con más o menos baldas o incorporar más armarios y cajoneras. Este diseño proporciona una zona de trabajo temporal, para visitantes o de apoyo a zonas de reunión o sociales.

Puestos de trabajo en un área central

Nos parece muy interesante y original esta propuesta de crear una zona central con puestos de trabajo corridos en una isla en U, y a su vez rodeados de otros multipuestos independizados por separadores. En el centro de la isla se ha colocado una mesa de reuniones no demasiado grande, para dar cabida a otra actividad más.

Esta combinación de fórmulas y distintas distribuciones de puestos de trabajo responde a diferentes necesidades laborales, pero también a la necesidad de aprovechar al máximo los espacios diáfanos de oficina con una organización de mobiliario adecuado e ingenioso.

Multipuestos en forma de L

Ésta es otra solución para puestos de trabajos corridos y enfrentados a la pared, pero en este caso con un diseño realizado a medida para que encaje perfectamente con el espacio disponible. La ventaja del mobiliario realizado por ebanistas y carpinteros es que se aprovecha hasta el último centímetro de espacio.

La encimera volada de piedra sintética se combina con un faldón de cajones de madera. Debajo de la mesa, se incorporó un ingenioso sistema de almacenamiento con puertas de rejilla de madera, que garantiza la ventilación adecuada de los equipos. La estantería metálica, divide y separa esta zona de la entrada a la oficina.

Estantería con escritorio

Cerramos nuestro recorrido con la estantería String, un diseño clásico del siglo XX, que consta de unos laterales de rejilla y baldas que pueden ser de cualquier tipo, desde tableros de mesa, hasta zapateros. Con este sistema se pueden hacer estanterías para el baño, la cocina, una biblioteca o una zona de estar.  Los módulos crecen y pueden colocarse en alto, cubrir toda la pared o solo la zona inferior.

Los creadores de esta estantería, que hemos visto y utilizado mil veces, aunque poco conocidos, fueron los arquitectos Nils y Kajsa Strinning, pioneros en un diseño que revolucionó los sistemas de almacenamiento en viviendas y oficinas en su Suecia natal y, con el tiempo, en todo el mundo, desde finales de los años 40 hasta bien entrado el siglo XXI.

Fotos: Limobel Inwo y OfficeSnapShot